GUANTES PARA CALOR

Los guantes contra el calor o guantes anticalóricos se consideran todos aquellos guantes que toleran riesgos derivados de una exposición al calor o a una llama en una de las posibles formas: fuego, calor de contacto, calor convectivo, calor radiante, pequeñas salpicaduras o grandes cantidades de metal fundido.

Los guantes anticalóricos de protección contra el calor son recomendados a todo personal que vaya a estar realizando tareas en las cuales se requiera una manipulación de cualquier tipo de objetos calientes o que contengan material a altas temperaturas. Para ello es importante saber de antemano que tipo de tarea se va a realizar y a las temperaturas que vamos a estar expuestos, por tal de adquirir unos guantes con las características necesarias que nos permitan salvaguardar nuestras manos.

El pictograma que encontraremos en su etiquetaje y que hace referencia a sus características de protección en guantes contra el calor es el siguiente:

¿Qué tener en cuenta a la hora de elegir guantes anticalóricos?

La fabricación de guantes térmicos o  anticalóricos puede ser de un único material, mixtos o con protección metálica extra. Para poder elegirlos correctamente debemos tener en cuenta algunos factores como la ergonomía, la temperatura a soportar, el tiempo de exposición y las herramientas que se vayan a usar con los guantes.

Tipos de guantes anticalóricos

Según la norma NTP 747 sobre Requisitos generales de guantes de protección, podemos clasificar los guantes térmicos en tres categorías:

CATEGORÍA I: Guantes de protección térmica a temperaturas inferiores a los 50º.

CATEGORÍA II: Guantes anticalóricos hasta los 100º de temperatura.

CATEGORÍA III: Guantes de protección térmica para temperaturas superiores a los 100º.